Pues a estas alturas ya del año, podemos decir abiertamente que , 2020, es el año más complicado de nuestras vidas.

El mundo tal como lo vivimos ( que no como lo conocemos, puesto que desconocemos muchos entresijos fuera de nuestro alcance) se desmorona.

Una nueva percepción viene a instaurarse en nuestras burbujas y parece que quiere quedarse pese a no ser bienvenido.

A pesar de lo mucho negativo que podríamos mencionar (que creo que todos lo sabemos), queremos dejaros una reflexión y que compartáis también la vuestra con nosotros.

Es cierto que hasta este año, lo de vivir en nuestra ‘burbuja’ era impensable puesto que recibimos estímulos y no-tan-estimulantes de nuestro ambiente lejano.

Pero este año vino así, de sopetón, como una palmada en la nuca que no llegamos a entender, y nos vimos forzados a pararlo todo.

Muchos se sintieron perdidos, otros sintieron ira, otros incomprensión y algunos alivio.

Es cierto que el ritmo frenético que conocemos, el famoso estrés o ansiedad, eran compañeros de camino para la sociedad que conocemos pero había que parar.

El modo de vida slow se iba imponiendo a fuerza, algunos lo predicábamos durante años pero esta situación logró verla de diferente forma.

Un parón en mitad de la incertidumbre.

Así es como lo tomamos, porque realmente, no sabíamos como, donde, cuando ni porqué apareció.

Mirar desde otro punto la situación es la ley emocional imponible en lo que queda de año.

No luches, no resistas, súmate y proactivate a este cambio. Es duro, lo se.

Todo cambio viene con pilares que caen y que nos sostenían sobre el nivel del mar pero ya no están, posiblemente no volverán.

Cuando un volcán erupciona, otro comienza a emerger.

Zurh

Es el símil de la vida, no hay más que esperar, es un péndulo que va y viene y estar en su movimiento pendular nos ayuda a no colapsar.

Si este break (rotura) lo miramos desde otro ángulo, nos saldrían unos cambios que debemos aprovechar:

Trabajar desde casa. Cuantos negocios pueden ser producidos desde casa y con el horario flexible. Poder cuidar de tus hijos, conciliación familiar. Cuidar de personas mayores. Menor gasto en transporte y menor colapso… Trabajar desde casa o desde donde tu quieras.

Dar el valor que merece los servicios de limpieza e higiene. Cuan importante es la vida de esas personas después de este caos, ¿verdad? Pues cuando pase, seguirá siéndolo igual. Que esos puesto laborales tengan una nomina y cuidado equiparable a su labor puede ser un cambio tras este caos.

La obsoleta educación. Todo el que está vivo en estos momentos conoce la enseñanza tal como lo es a día de hoy. No se han introducido cambios ni experimentado nuevas formas de evaluación ni aprendizaje. En pleno siglo XXI y con todos los conocimientos que echan abajo a viejos estudios o formulas no se han evolucionado esos conocimientos en el aula. Tal vez sea momento de hacer la labor del profesor menos sustituible.

También hay otros factores, a tener en cuenta, que nos dejan este caos o cambio de visión. Se me ocurren algunas que siempre abogo y son indispensables para el buen funcionamiento de todos. Se enmarca en el plano general y, si me seguís, he estado haciendo comentarios sobre ello.

Retomar la industrialización. En un país, lo sustentable no es lo efímero sino la producción. En nuestro caso, tanto industria como agricultura, son esenciales y valorarlas y mantenerlas debería ser prioridad. Tanto textil, metalurgia, producción de piezas, procesado…éramos una cantera de industria.

El modo de producción. Estalló el boom de lo ‘barato’, pasamos por ello en la anterior ‘crisis’ y no aprendimos nada, más que sostener una producción insostenible. La calidad de vida va ligada a la forma de producción y con ello la sostenibilidad. Sobre producir no es la solución. Un menor stock impulsa a la creatividad y a una productividad más variada (como ocurre en pequeñas firmas como la nuestra).

Un dato curioso en la moda es el aumento disparado del algodón, con el consiguiente aumento del coste. Todo ello se produce por el uso masivo de mascarillas, tanto sanitarias como convencionales.

Ya para terminar, nos gustaría saber tu opinión o ideas proactivas sobre tu punto de vista de este año.

Sigue la próxima semana…

Próximo articulo seguirá en el plano emocional sobre este año.